miércoles, 18 de agosto de 2010

Summer Books

Alguien me preguntaba el otro día, qué libro estaba leyendo ahora mismo. Siempre que me hacen esta pregunta me quedo unos segundos callada y a veces pongo el dedo índice sobre los labios y miro hacia arriba, como si la respuesta me sobrevolara y yo pudiera atraparla al vuelo con sólo una mirada. Y es que a veces cuando hago el amago de pensar, miro hacia arriba, sin mirar a ningún sitio en concreto y luego acierto a dar alguna respuesta. Cuando digo amago de pensar, es que es amago, y no otra cosa, pues la respuesta está clara pero no sé cómo darla. Nunca leo un solo libro, por lo que dar una respuesta con un sólo título es complicado para mí, si no imposible. Respondí con un título, luego dije el siguiente, y después hubo una tercera respuesta, una cuarta y una quinta. Cuando llegas al quinto título llega otra clase de amago, el de la persona que lucha consigo misma. ¿Me cree o no me cree? That´s the question. Entonces llega la siguiente pregunta. Siempre la misma: ¿No te haces un lío con ellos? No -respondo. Nunca.


Procuro elegir los libros que leo, siempre de temáticas diferentes, de autores distintos o de épocas dispares. Otras veces ocurre todo lo contrario. En ninguna ocasión mezclo uno con otro. Tampoco los suelo terminar a la vez. Cuando alguno se va acabando, llega el reemplazo al día siguiente. Nunca me acuesto sin varios libros sobre mi cabecera. Duermo mejor teniéndolos cerca, recién cerrados, recién leidos, recién vividos, recién aprendido algo de ellos. Siempre se aprende. Es fascinante. Para mí es fascinante.


Este verano está siendo enriquecedor en cuanto a todos los que han pasado por mis manos, por mis ojos, por mis pensamientos, por mi paladar, por mi corazón, mi alma y mi cama. Suelo leer en la cama. En vacaciones también uso el sofá, o una butaca, o una hamaca en la terraza, o el suelo, enmedio del pasillo. También me vale la cocina. En un avión, en el coche, en una sala de espera, en otro país, durante la merienda. Con las gafas puestas. Con cientos de separadores distintos, traidos de cada rincón de mi mundo conocido y de los mundos conocidos de mis amigos.


Os enumero y detallo los que estoy leyendo ahora mismo, por si os apetece compartir su lectura conmigo, en este momento. No voy a enumerar los que he leido este verano, (desde Junio hasta agosto), porque son varios y no pretendo dar cuenta de todos, aunque de alguno ya he hablado por aquí en alguna entrada. Tampoco enumeraré los que tengo sobre el escritorio, con el turno sacado, para ser los siguientes, pues daré cuenta de alguno de ellos en meses venideros.




No sé vivir sin leer. Esta soy yo.




LIBROS QUE ESTOY LEYENDO, (Agosto 2010):


1. Momentos de vida (Virginia Woolf)


Se publicó póstumamente en 1976 y es la única obra autobiográfica de Virginia Woolf (1882-1941). Lo conforman seis textos y constituyen un viaje cronológico por los momentos álgidos de la vidad de la gran escritora inglesa.


Me está resultando fascinante porque estoy conociendo no sólo a la autora, a su familia y a sus sentimientos, si no su forma de escribir un diario, (tan distinto a las novelas), y el Londres de la época de su infancia, de su adolescencia, su juventud y su madurez, desde la cual escribe y que transcurre en una época difícil y caótica tanto en Londres como en el resto del mundo, pues la guerra acechaba con comenzar. El resto es bien conocido, sólo hay que recurrir a la Historia.



2. Franz Kafka y Praga (Una guía literaria de Harald Salfellner)


Franz Kafka era Praga y Praga era Franz Kafka, escribió una vez Johannes Urzidil. Para quien siga el rastro de la vida de Kafka, su camino lo llevará al corazón de la antigua ciudad imperial a orillas del Moldava. Kafka está enraizado en el suelo de Praga. Acabo de llegar de Praga, hace escasos 6 días y ciertamente, por cualquier calle, puente o plaza que cruzara, podía respirar a Kafka en el ambiente. Una camiseta allá, una frase acá, una casa donde vivió, un palacio donde trabajó, un reloj que marcó sus horas, un río al que se asomó, cientos de camisetas, tazas, posavasos, plumas y libretas que hablande su obra. Libros, posters, chapas, vajillas, paraguas, bolsas... Praga es el traje de tejados rojos que Kafka vistió toda su vida. En este libro se despliega un increíble tesoro de acontecimientos históricos y políticos, de historia de la cultura y de citas de las obras de Kafka. En él conoceremos no sólo la vida y obra del escritor y poeta, si no, la Praga dorada de hace un siglo.



3. Océano mar (Alessandro Baricco)


Como ya comenté en una entrada anterior, empecé a leer a Baricco hace poco, pues antes no sé por qué, me había negado a leer nada suyo. Seda, como comenté, me encantó. Luego leí Tierras de Cristal, de la cual también di cuenta en este blog, y ahora le ha tocado el turno a Océano mar. Este libro también me lo recomendó mi amigo Pedro de puntoyseguido. Dicen que leyendo este libro se puede oír la voz del mar, que se puede leer como historia de suspende, como poema en prosa, como un conte philosophique o una novela de aventuras. En cualquier caso, domina la alegría furiosa de contar historias a través de una escritura particular. Dicen también que detrás del narrador se esconde un mago, un equilibrista.


El mar inmenso, el océano mar, que corre infinita más allá de toda mirada, el desmesurado mar omnipotente -hay un sitio donde acaba, y un instante-, el inmenso mar, un lugar pequeñísimo y un instante de nada.



4. Amor perdurable (Ian McEwan)


Soy fiel seguidora de este autor, como ya he comentado en alguna ocasión. Chesil Beach me pareció una novela corta magníficamente escrita. Expiación, su novela premiada con el WH Smith Literaty Award, el People´s Booker y el Comonwealth Eurasia, es una auténtica maravilla que además fue llevada al cine con gran éxito, y el libro de relatos Primer amor, últimos ritos que obtuvo el Premio Somerset Maugham, demuestra que además de gran novelista, Ian McEwan es un gran contador de relatos. Amor Perdurable comienza así: El principio es fácil de señalar. Me quedé un rato pensando en esta primera frase. Los principios son fáciles de señalar. Sí. Memorables casi siempre, en el buen y en el mal sentido, según el caso. En este libro Ian urde una ambigua fábula moral, un thriller acerca de la naturaleza misma del amor y su localización en la encrucijada entre la racionalidad y la locura. Lo que más me gusta es que está contada con inteligencia, como él sabe contar las historias, haciendo hincapié en cada detalle hasta que el lector logra verlo tan nítido como el autor. Es un gran prosista, sin lugar a dudas. De momento sigo en vilo con la historia. Voy por la mitad.




5. Crónica de una amistad, correspondencia y otros escritos (Henry James y Robert Louis Stevenson).




Me gustan los relatos y las novelas epistolares. En este caso, este libro, no es ni lo uno ni lo otro, son cartas entre dos grandes escritores. He leido bastante de Henry James como para tener sus libros en un lugar privilegiado de mis estanterías de libros, y de Stevenson sólo me cabe decir, que es una de mis debilidades. El primer libro que leí siendo niña fue La isla del tesoro. Ahí sobran las palabras.


En este libro, se recogen en forma de crónica, la amistad entre ambos escritores. Si siento debilidad por las cartas, como ya comenté en una de mis entradas, siento una debilidad extrema por la amistad. En este libro, obtengo algo de ambas: fantástico.




Todo comenzó en septiembre de 1884...




Henry James a Stevenson: Acabo de leer la deliciosa novela La isla del tesoro a la que califico de deliciosa porque me parece maravillosamente lograda en lo que se propone.




Stevenson a James: Me regocija oírle hablar con tanta amabilidad de mi obra. YO me veo como un campesino muy rudo y manazas, no adecuado para ser leído, y mucho menos elogiado, por un hombre tan cabal, tan diestro, tan dotado como usted.
Una vez presentados, sólo me queda
dejaros y seguir leyéndolos. Dada cuenta de ellos, me cabe decir que yo los
estoy disfrutando, cada uno de manera diferente, cada uno intensamente. Si
habeis leido alguno de ellos o vais a hacerlo, no dudeis en compartirlo conmigo.
Buenas noches.
I.M.G.
















10 comentarios:

  1. Querida escritora,
    Espero que cuando recibas esta carta te encuentres bien, yo bien gracias a Dios.
    He estado de vacaciones con la familia, como podrás leer en mi blog si Vd. tiene se digna a visitar, será un orgullo y una satisfacción recibirla en mi humilde rincón, como Vd. bien sabe.
    Me ha gustado enormemente leer que está Vd. bien informada en lo tocante a libros y que, además, disfruta de su compañía.
    Por si quisiera hacer una nueva amistad, le propongo "El retrato de Dorian... no sé qué" que parece que este verano va a dar qué hablar.
    Suya afectísima, por siempre,
    MariCari

    P.D.: tonterías a parte, espero que estés pasando un buen verano. Besos y abrazos.

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  2. jajaja, querida MariCari, qué bien usado el tono en tu respuesta epistolar. Me encanta, jejej.
    El retrato de Dorian Grey, del gran Oscar Wilde, lo leí hace muchísimos años, pero tengo a bien aceptar su proposición, (aquí imito el tono en la respuesta), de volver a releerlo. Cuán placer obtengo en mis relecturas. Indescriptible.
    Volviendo a mi tono habitual, tipo "casual", (léase con acento en la primera a y no en la última, para que suene a una palabra más actual), decirte que espero que tú también estés teniendo un buenísimo verano. Yo vuelvo al trabajo ya el lunes, pero bueno, aún me quedan 3 días, y estamos de Feria en Málaga, así que a disfrutar todo lo posible y sin dejar de leer, claro. Los que escribimos tenemos que leer mucho, y aprender cada día de los grandes, por si se pega algo... (ojalá, ¿no?). Muchas gracias por tus sugerencias, que son siempre bienvenidas, tanto como tus visitas a mi calle de Chawton. Espero que pronto me pueda poner al día en lo tocante a visitar las calles anexas. Por supuesto, la tuya, de las primeras.

    Besitos y hasta pronto.

    Isa

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  3. Isa, es un gustazo pasear y leer Chawton St., gracias por compartir tus lecturas y tus impresiones.

    Un abrazo
    L;)

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  4. Gracias Loli, espero que nos veamos este finde y ya comentamos en persona, que eso sí que es un gustazo ;-)

    Besitos

    P.d. Me ha gustado mucho lo de tus panochas, pero al ir a poner el comentario, se me cayó la red, qué disgusto.

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  5. Hola Isa, hace tiempo que me cuento entre tus seguidores y hoy me he hecho un tiempito para saludarte como se debe. Yo también disfruto enormemente de la lectura y me encanta leer sugerencias para conocer nuevos autores. Llego hasta tu calle siguiendo a Jane Austen, de quien soy fan.
    Si quieres puedes pasar por mi callecita también.
    Saluditos,jazmín.

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  6. Hola Jazmín, encantada de conocerte. Gracias por seguirme. YO también he paseado por tu calle alguna vez. Digo alguna vez porque últimamente no he paseado mucho. El verano, el calor, han hecho que pase poco tiempo frente al ordenador, sobre todo porque el resto del año paso unas 14 horas delante de él. Pero ya termino mis vacaciones hoy, las pilas están recargadas, el calor sigue lo mismo, peeeeroooo... empiezo a pasear y tu calle será de las primeras que visite. Gracias por invitarme.

    Un besito

    Isa

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  7. Hola, veo que coincido con vos en algunas cosas y gustos.
    Yo también suelo leer más de un libro al mismo tiempo, aunque ahora estoy leyendo uno sólo.
    También me gustan mucho Ian McEwan, Henry James, y me gustó mucho Seda.
    En estos momentos también estoy leyendo una autobiografía de una escritora, pero no es Woolf, sino una amiga de James, Edith Wharton.
    Saludos.

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  8. Hola Luciana, encantada de conocerte. Me alegra que compartamos gustos y lecturas, siempre se disfruta más de lo que a uno le gusta si puede compartirlo con alguien que lo disfrute de igual manera. No conozco a Edith Wharton, o por lo menos no me suena. Gracias por descubrírmela. Intentaré leer algo de ella y te comentaré. Me encanta que me descubrais a autores que no conozco o que no he leído. Un placer conocerte y espero verte por aquí siempre que te apetezca.

    Besitos

    Isa

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  9. Seguro que conocés a Edith Wharton, sólo que no sabías que era ella la autora.
    Es la escritora de La edad de la inocencia entre otras novelas.
    Saludos.

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  10. Sí, es cierto, si tengo el libro, qué despiste. Cuando la busqué en la wikipedia, soy adicta a ella para buscar información básica, me di cuenta enseguida de que sí que la conocía porque tengo el libro y obviamente lo he leido y he visto la película y me encanta... No caí en ella, la verdad. Gracias por el apunte y por devolverla a mi actualidad.

    Besitos

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