jueves, 25 de noviembre de 2010

Festival Eñe (12-13 Nov. Madrid) 4ª Parte

21:30h. Viernes 12 de Noviembre. 5ª Planta. Sala María Zambrano. Conferencia Exprés sobre un tema polémico: ¿Se puede aprender a ser escritor? ¿Sirven para algo los talleres literarios? ¿El talento nace o se hace?

La escritora, profesora de literatura, miembro del cuerpo superior de administradores civiles del estado y finalista del premio primavera 2010, María Tena, contaba con 30 minutos para hablarnos de todo ello.

Loli y yo nos sentamos en última fila. No soy persona de últimas filas, sino más bien de primeras, pero teniendo en cuenta que a las diez debíamos salir pitando para la conferencia de Juan Bonilla, lo más lógico era sentarnos al final para no molestar a nadie si teníamos que salirnos antes.

Este tema me interesaba especialmente por lo que mi atención era toda de esta mujer que desde que tenía diez años vive con Antonio Machado en su mesilla.

Atravesó la sala agarrada a una muleta, sin dejar de sonreir con la boca, con los ojos y las mejillas. Diríase que una gran sonrisa recorrió la sala desde la puerta hasta la silla en la que minutos antes se sentaba Patricio Pron. Mientras hacían un recorrido breve por su extenso currículum ella seguía sonriendo y con los ojos entrecerrados parecía mirarnos uno a uno y decirnos: encantada de conocerte. Tal era su semblante. Encantador.

- En este oficio, de escritor, nos hacemos continuamente preguntas, más que obtener respuestas -comenzó diciendo.

Después añadió con rotundidad: NO se puede aprender a ser escritor.

- Hay que tener una previa predisposición o talento o haber tenido mucha lectura en casa, pero en realidad viene de nacimiento. NO se puede aprender de la nada a ser escritor. Ser escritor es una tarea muy pesada. A pesar de ello se tiene que intentar. Se pueden aprender técnicas.

- ¿Por qué queremos ser escritores? -lanza la pregunta al aire y la masticamos y antes de escupirla, ella se contesta, NOS contesta: Porque queremos serlo. Porque es un impulso, a pesar del camino de altibajos, del camino solitario, del duro camino. El impulso es el deseo. Compensa lo que te apasiona. La escritura tiene que ser un deseo y no sólo de un momento, hay que sostenerlo. Los escritores somos los que mantenemos ese primer deseo de ser escritor. La escritura es como un matrimonio. Hay que seguir casado con ella. A veces te pone los cuernos, o se va, etc, etc, pero hay que aguantar todo eso para ser escritor. Eso no es una técnica ni se puede dar en un taller literario. Esa pasión dura toda la vida.

Por un momento el silencio se hace dueño de la sala mientras ella vuelve a sonreír sin dejar de mirarnos. Bebe un sorbo de agua y prosigue:

- Para ser un buen escritor hay que estar solo. Hay que tener constancia, paciencia, disciplina gusto por la soledad.

Desde mi posición veo algunas cabezas, que como la mía, asiente. La mayoría de los que estamos allí somos unos solitarios en realidad, pienso. Y pienso en las horas que paso sola con mi ordenador, con mis letras, con mis libros. Y María sigue hablando:

- En los talleres damos el golpecito en la espalda que necesitamos para seguir. El escritor nace para ser leído. Yo escribía sin parar: poesía, cuentos, trozos de novelas... y me apunté a un curso de Luis Landero. Luis Landero no cree en los talleres. Luis me dijo que no iba a decirme si yo escribía bien o mal, me dijo que teniendo esa pasión que tenía por escribir, tenía que dedicarme a la escritura y hacerlo en serio y comprometerme. Y desde hace 7 años escribo pase lo que pase. Es importante ese golpecito en la espalda.

- Una cosa que paraliza a los escritores es el respeto a la literatura. ¿Qué aporto yo?, se pregunta el escritor. Soy una hormiga al lado de tantos gigantes, piensa. Ese exceso de responsabilidad te lo tienen que poner en tu sitio. Todos los que escriben y leen mucho pueden escribir y acabar escribiendo algo decente. Todos tenemos algo que contar. Todos tenemos unas huellas, algo propiamente nuestro y si lo sabemos expresar bien podemos escribir algo muy digno. Tenemos que creer en nosotros mismos. En los talleres te tienen que hacer creer en ti. También a ser humildes y a no quedarnos en la primera escritura. Vila Matas dijo: Si alguna cosa se jodió en los escritores es la moral de tomárselo en serio. La humildad es muy importante. Hay que pasar muchas horas delante del papel. El talento es una larga paciencia. Así pues, lo más importante que debe poseer un escritor es paciencia y humildad. Donde hay humildad hay saber. Donde hay soberbia, no hay aprendizaje y te lleva al fracaso. Los escritores siempre tenemos que aprender porque a la vuelta de la esquina está el fracaso.

- No hay que tener prisa, ahí es cuando se mete la pata. Hay que tener paciencia y tomárselo muy en serio. El mejor taller para escribir es la lectura. Soy muy partidaria del plagio para aprender los trucos de los grandes autores, de los clásicos sobre todo, pero también de los contemporáneos. Os recomiendo leer El gran Gatsby de Scott Girzgerald u Otra vuelta de tuerca, de Henry James. Hay que aprender de ellos, de los grandes.

Este verano me leí Otra vuelta de Tuerca, pero ahora me la apunto para su relectura. Interesante.

- El primer texto nunca funciona -prosigue- hay que ir párrafo por párrafo y escribir treinta borradores. Los detalles son importantísimos. Hay que ser atrevidos y desmesurados pero negociar con la realidad, con lo concreto. Hay que evitar dar moralina. Hay que saber contar lo concreto y mostrar al lector y que él se crea esa falacia que le estás contando. No hay prisa. Nuestra obra es lo que queda, démosle tiempo, que no nos quede una chapuza.

Loli mira el reloj. Son casi las diez. Juan Bonilla debe estar llegando a la quinta planta, dirigiéndose hacia la sala Valle Inclán para dar su conferencia. Tengo hambre. Es hora de cenar. Loli me susurra que se marcha a ver a Juan. Yo le contesto que me quedo con María. La conferencia es demasiado interesante como para dejarla a la mitad. Me quedo sola en la última fila, con toda la atención puesta en las palabras de María, sonriendo sin darme cuenta.

- Teneis que hacer una lista de imágenes porque la inspiración es una tortura. La imaginación y la memoria están hechas de imágenes. Hay que revolver la memoria y deformarla. Tenemos que manipular la propia realidad. La realidad de verdad no hay que contarla. También hay que seleccionar. Si metemos demasiadas cosas inverosímiles juntas, no funciona. Lo que debemos hacer es mezclar las imágenes de la realidad porque ésta por sí sola no funciona. Hay que meter la mano en la memoria y sacar una imagen y cmo una piedra o una madera, hay que trabajarla y manipular los recuerdos. Es muy útil hacer los ejercicios de "Yo me acuerdo". El esmero es el único deber moral del escritor. No debemos retrasar el momento de escribir. Tampoco hay que esperar milagros. Debemos entrar en el conflicto directamente y evitar las florituras, así como evitar las personas reales. Meted al personaje en un conflicto. No aburrais al lector. No expliquéis. Mostrad. Dedicad tiempo a las escenas de tensión. Los escritores no resumimos.

Miro a mi alrededor un segundo, mientras escribo en mi cuaderno cuanto dice María Tena. La mayoría también escribe o trata de memorizar lo que oye.

- Dejad respirar a los personajes. Dejaos aconsejar. Preocuparos de escribir el mejor libro que podais.

La sala estalla en aplausos. Yo cojo el boli y lo aprieto entre los labios, apoyo el cuaderno en mis rodillas, y aplaudo con ganas. La gente se levanta y comienza a marcharse, yo me acerco a saludar a María. Le doy la enhorabuena por la conferencia. Ella no deja de sonreir y sigue contagiándome. En algún momento de nuestra charla le regalo nuestro librito de álbum de familia. Se muestra encantada e ilusionada y me pide que le cuente de qué se trata. Y le explico. Y le hablo de las fotos del interior y de cómo surgieron las historias. Nos despedimos con dos besos. Me quiero llevar una foto conmigo. Miro a mi alrededor. Un chico alto, rubio, guapo, con barbita, se ofrece a sacarnos la foto. Le doy mi cámara. Está quitado el flash y sale borrosa. El chico se ofrece a hacerla él con su cámara. Es una cámara grande, profesional. Sonrío, se lo agradezco y le digo: ¿y cómo la consigo después yo?. Él sonríe a su vez y me dice que me la enviará. Me fío pero quiero tener la foto en mi cámara y llevármela conmigo. Le agradezco el gesto de nuevo y le ofrezco mi cámara. Por favor, con la mía. Él la cojo, enfoca y dispara. Salimos muy risueñas. Le doy las gracias a los dos, a María y al fotógrafo, atravieso la sala y salgo precipitadamente. Subo las escaleras corriendo, directa a la sala Valle Inclán, donde fue la conferencia de Garriga. En primera fila están mis compañeras.


22h. Viernes 12. 5ª Planta. Sala Valle Inclán. Conferencia Exprés. Juan Bonilla. Tema: Ambiciones Desmedidas.


Juan está nervioso. Sus manos tiemblan sobre el papel antes de comenzar a hablar. Se disculpa por traer su discurso escrito. Es tímido. Los que lo hemos visto más veces lo sabemos, los que lo ven por vez primera lo descubren enseguida. Le tiembla un poco la voz. Lo reconoce. Se excusa nuevamente y nos dice que si no trajera el discurso escrito, la conferencia sería incomprensible porque tartamudearía y sólo diría palabras atropelladas y vocales interminables e indecisas. Comenta que escribe como un niño educado, piensa como un niño y habla como un niño también. El tema que debe abordar es interesante, pero a esta hora nos resulta un poco cansino. Tomo poca nota, es más interesante oír cómo cuenta que Maiakovski pensaba que el poema podía cambiar la vida de los otros o cómo Gottfried Benn pretendía que sus poemas fueran capaces de devolver a las tabernas a quienes se hubiesen jurado no probar una gota más de alcohol. Neruda dijo que un poema podía hacer caer un régimen. La ambición desmedia y sus fracasos. Habla de Albatros y de cómo poetas o escritores de sensibilidad extrema en la escritura, en su vida real eran tiranos. Después comenta que escribir para que te quieran más es comedido o se ajusta mejor a las posibilidades de un poeta. El propósito esencial de la poesía es cambiar la vida. No hay que hacer inmortal al poeta sino al lector.


Lee pausadamente, hace algún comentario mirando al público y vuelca de nuevo la vista en los folios. Anoto alguna cosa: Hay que matar el claro de Luna. Contradecirse es vivir.


Cierro mi cuaderno. Lo guardo en el bolso. Juan deja los folios y se pone a hablar porque ha dejado un hueco en blanco para la improvisación. Habla de la vida de Maiakovski. Me fijo en sus manos. Tiemblan. También sus párpados. Sus mejillas están tensas. Cuando sonríe hace una mueca. Me parece atractivo. Su inseguridad al hablar, también. Deberían editar un libro con todos sus discursos. Es realmente bueno.


Cuando termina la conferencia nos acercamos a saludarlo. Se alegra de vernos. Nos recibe con una sonrisa. A él, como a Garriga, no le damos un ejemplar de álbum de familia, porque lo tienen de hace tiempo. Conversa con Loli, que es quien más lo conoce. Le contamos algo de Garriga. Al final, nos hacemos una foto. Fernando Paz, Director de Desarrollo de La Fábrica Editorial, se ofrece a hacerla.

María Tena, Juan Bonilla, Marcos Giralt Torrente y Patricio Pron, con nosotras.

Bajamos los cinco pisos y decidimos dar el viernes literario por finalizado. Sin quitarnos la chapa, como si lleváramos el backstage de un concierto colgado al cuello, tiramos para la zona de Huertas. María fuma un cigarro. Loli habla sobre Bonilla. Yo respiro el aire de Madrid, tan diferente al malagueño. Hace frío, pero no molesta, no cala los huesos. Llegamos a una calle donde acaba de comenzar "la marcha" de los viernes. Alguien nos ofrece un descuento en copas, alguien nos pregunta por un bareto. Nosotras sólo queremos cenar algo en un lugar tranquilo. Lo encontramos cerca. Procuramos que la cena no sea muy pesada. Recorremos distintos instantes del día, desde la llegada a la estación Zambrano por la mañana temprano, hasta la llegada a Atocha, la odisea de las entradas, las chapas con la coma, y las distintas conferencias a las que hemos tenido la suerte de acudir. Se nos han quedado muchas atrás, pero muchas otras llegarán nada más empezar el día siguiente. El sábado 13 de noviembre promete, comenzando por un buen desayuno en el Hotel de las Letras, en Gran Vía, junto a escritores, a organizadores del festival, etc etc. Pero antes, nos despedimos de María, subimos al Hostal y en un santiamén, el que dista entre la ducha, el pijama y las llamadas a casa, nos ponemos a escribir una crónica para nuestro grupo puntoyseguido. Loli tiene que salir a pedir la clave del wifi. Una vez obtenida, mi netbook se lanza al ciberespacio y desde esas camas del hotel Astoria, nos comunicamos casi a las 2 de la madrugada, con nuestros compañeros aquí en Málaga. Todos a la vez sonreímos. Estamos disfrutando juntos, como siempre. Los siete.

Buenas noches.

Continuará...

(Con Isabel Muñoz, los hermanos Tusquets, Espido Freire, Jan Cruz, Manuel Leiva, Almudena Grandes, Pablo Álvarez, Julia Gutiérrez Caba, Vicente Luis Mora, Rafael Chirbes y nuestra estrella del festival: El gran Andrés Neuman).



Fotografías propiedad de Isabel Merino González.

I.M.G.
















6 comentarios:

  1. Isa, muchas gracias por compartir toda la conferencia de María Tena, me fui con ganas de quedarme y escucharla hasta el final. Me encanta todo lo que cuentas y lo bien.
    Eres la mejor reportera dicharachera!!!!

    Muchos abrazos
    L;)

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  2. jajaja, gracias a ti por dejarme comentarios, que poca gente lo hace. Así dan ganas de seguir ;-)

    Besitos

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  3. Hola,
    perdona que me meta en tu blog. Sólo quería informarte de que muchos de los discursos o conferencias de Juan están publiados en un volumen titulado La plaza del mundo que hace un par de años publicó la Universidad de Valladolid.
    Un saludo.

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  4. Hola, encantada de que entres en mi blog, y sobre todo que me dejes un comentario y no sólo eso, si no que me sugieras algo tan interesante y que desconocía. Me apunto el título que me ofreces y trataré de buscarlo. Los discursos de Juan son tan buenos que realmente merecían estar en un volumen. Recuerdo la presentación que hizo de El anorak de Picasso de Garriga Vela, aquí en Málaga, hace unos meses. Fue fantástica. Lo llevaba todo por escrito y mientras lo oía pensaba: Necesito tener ese discurso. Finalmente lo obtuve. Es realmente bueno.

    Un saludo y espero que me visites siempre que quieras y sobre todo que lo que leas sea de tu interés o te resulte entretenido. No me gusta aburrir y pretendo no hacerlo, no sé si lo logro, pero en eso estamos.

    Isa Merino

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  5. Isa... ¿Te enviaron la foto con Maria Tena? La que os hizo el chico alto, guapo, rubio con barbita...
    Voy a por la 5ª entrega.
    Elysa

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  6. jajaja, Elysa, al final la hizo con mi cámara. No es que no me fiara, (Pablo, sabes que me fío), pero quería llevármela conmigo.
    La he añadido en el collage final de esta misma entrada, en el que también se ve la foto con Patricio Pron, Marcos Giralt y Juan Bonilla.

    Está en pequeñita, pero se nos ve muy risueñas a las dos, jaja.

    Qué "pechá" de leer te estás pegando, Elysa. Se agradece el interés.

    Un beso

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